domingo, 9 de diciembre de 2007

Una experiencia para conocer

Por una Educación Pública, Popular y Autónoma
Acerca de la Oficialización de los Bachilleratos Populares

Compañeros y compañeras:
Queremos compartir la inmensa alegría que invade nuestros cuerpos y nuestros corazones...

Luego de cuatro años de lucha, de decenas de marchas, escraches y festivales, de incontables y agotadoras reuniones con funcionarios, de miles de firmas juntadas en petitorios, de atravesar crisis, de superar marañas burocráticas, de eludir las trabas de quienes quieren vanagloriarse con el trabajo de uno para sentirse más poderosos, de construir cotidianamente un espacio educativo novedoso, crítico, popular y emancipatorio logramos la oficialización de siete
experiencias de Bachilleratos Populares en organizaciones territoriales, barrios y fábricas recuperadas de la provincia de Buenos Aires. Además de la oficialización, el Estado se compromete a dar el 60% del financiamiento (nosotros seguiremos peleando, entre otras cosas, por el cien por ciento de financiación).

Para el Bachillerato Popular Simón Rodríguez y la Organización Popular Fogoneros esta victoria es muy importante. Muchas veces nos quisieron convencer de caminos más cortos, nos ofrecieron atajos con todas las "facilidades" pero poniendo en riesgo nuestra autonomía, nuestra propia capacidad de gestión político-pedagógica de la experiencia, nos convidaron a dejar "un poco" nuestros ideales para conseguir la oficialización; nos invitaron a sumarnos al "tren de la historia" de un gobierno cada vez menos "nacional" y menos "popular" (si es que alguna vez lo fue), nos invitaron (y muchas veces nos
quisieron forzar) a ir en contra de nuestras ideas... pero dijimos que no, que preferíamos luchar junto con nuestros hermanos y compañeros de los otros Bachilleratos Populares, eligiendo el camino más largo pero el más coherente, el más difícil pero el más digno, el camino que parecía "imposible e ingenuo", el de la lucha y de la paciencia, el de la perseverancia. .. Hoy es evidente todo lo que puede un cuerpo colectivo, hoy reafirmamos que "la única lucha que se pierde es la que se abandona" y que los sueños se hacen a mano y sin permiso, hoy vemos
que con nuestra lucha cotidiana vamos construyendo el cambio social, aquí y ahora, desde abajo y por abajo…

Hace cuatro años este irreverente sueño de un espacio educativo popular y autónomo parecía irrealizable. Rescatando las luchas y las experiencias de educación popular de Paulo Freire, de Iván Ilich, de Jaques Ranciere, de Simón Rodríguez, del Movimiento de Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST) de Brasil, de los zapatistas de México, de la CONAIE de Ecuador, aprendimos a escuchar, a enseñar aprendiendo para construir nuestras propias experiencias de educación popular. Hoy podemos decir con orgullo que nuestros títulos son oficiales, pero,
sobre todo, que son nuestros títulos, conseguidos por la lucha, por la alegre rebeldía de estudiantes, vecinos y profesores, estos títulos son un sueño colectivo hecho realidad...

Este es un triunfo de todas y todos, genuino, revolucionario, emancipador. Un triunfo de los estudiantes que creyeron en nuestro proyecto y se hicieron parte de él, que se animaron cuando sólo había incertidumbres, dudas y luchas por venir. Un triunfo del barrio Las Tunas que hoy tiene, junto con el Bachillerato Popular Las Dos Palmeras, dos escuelas populares para jóvenes y adultos. Escuelas
populares que tienen como objetivo radical generar "una pedagogía que privilegie la participación, la liberación y que se convierta en una práctica emancipatoria que modifique la realidad". Que tiene como objetivos la creación de mundos nuevos. Y esta oficialización nos suma fuerza para multiplicar la apuesta. Para seguir luchando por la liberación que apunte a la transformación objetiva de la situación opresora. Esta oficialización es un paso más de ese desvelamiento del
mundo de la opresión del que nos habla Freire, para luego generar ese compromiso con la transformación.
Ahora, más tranquilos, contentos y festejando, no tenemos que olvidar ese norte o, más bien, ese sur, ese Sur donde quepamos todos…

Nuestra lucha es para que el estado reconozca y financie el funcionamiento de estas experiencias de educación popular de las organizaciones sociales, pero sin coartar su autonomía y la autogestión política y pedagógica de las escuelas populares. Esta lucha y este pequeño triunfo nos fortalece como organización y nos presenta nuevos desafíos, con todas las certezas y dudas que llevamos caminando… Es un paso más que nos permite tener nuestras propias escuelas y poder construir, dentro y fuera de éstas, otro tipo de relaciones sociales. De este modo apuntamos a crear mundos dentro de otros, con relaciones ya no basadas en la opresión y la explotación, sino en la solidaridad, autonomía y horizontalidad. Apostando a la utopía y la revolución en un camino hacia otro tipo de educación
emancipatoria. .. Esto no significa que estemos en contra de la Escuela Pública, sino que además de apoyarla y defenderla creemos que también es necesaria su transformación. Una manera de empezar este camino es abriendo espacios educativos ligados a la Educación Popular y los movimientos sociales, construyendo una Educación Pública, Popular y Autónoma.

Hoy, queremos festejar y compartir la alegría y la emoción de la lucha, pero sabemos que esto no se termina hoy, sólo continúa. Se nos viene un tornado de burocracia. Infinidad de papeles, responsabilidades y trabas políticas. Seguiremos luchando y construyendo nuestra alternativa.

Seguiremos luchando por la construcción de nuevos Bachilleratos Populares, en los barrios, en las fábricas recuperadas por sus trabajadores, en movimientos campesinos e indígenas, y en otros movimientos sociales.

Seguiremos luchando por un subsidio del 100% para estas experiencias.

Seguiremos luchando por el reconocimiento de los educadores populares.

Seguiremos luchando y defendiendo la educación pública.

Seguiremos luchando por una ley a nivel nacional que contemple la especificidad de las experiencias educativas de los movimientos sociales y de educación popular.

Seguiremos luchando por una ley de educación que sea para todos y todas, que garantice una educación digna, autónoma y popular para construir sujetos educativos críticos y libres…

Seguiremos luchando, también, por el cambio social; por un mundo nuevo y, por lo tanto, mejor... ese mundo nuevo que construimos día a día, aquí y ahora. Estamos escribiendo y construyendo la historia porque "el mundo no es, está siendo" y, por eso mismo, lo vamos a cambiar...

Trabajo Digno, Educación Popular y Cambio Social
Construyendo por abajo y desde abajo el Cambio Social

Bachillerato Popular Simón Rodríguez – Las Tunas Organización Popular Fogoneros Las Tunas, 3 de Diciembre de 2007

(Aporte de Julio Chueco de Militantes de la Psicología Social)

No hay comentarios:

Publicar un comentario